lunes, 28 de junio de 2010

Escarbo en el pasado...

Escarbo en el pasado...
Me recuesto pensando en el pasado,
en el instante en que ame,
en el momento en el que me enamore,
me avoque solo a recordar lo que paso...
Recorde lo que fue amar,
necesitar y extrañar,
recorde lo que senti
cada vez que creia en ti...
Encontre entre algunas hojas amarillas,
retazos del pasado,
junte todo lo vivido,
tratando de recuperar algo...
Me ilusione con mi ilusion,
me sorprendi de mi propio amor,
porque esa sensacion jamas la volvi a sentir,
porque deseo enamorarme otra vez al fin...
Con cada frase, mas me emocionaba,
mas queria seguir, mas lagrimas caian,
mas tiempo quise vivir en ese pasado,
mas que nunca quise recordarlo...
De repente volvi, sin nada,
sin ese amor que me hizo ser el que no soy,
que me hizo ser el que soy,
y me hace querer ser el anterior...
Escarbe buscando un poco de amor,
el amor que me hace falta,
la ilusion que tuve y perdi,
escarbe en el pasado... buscandote a ti.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.

Me faltas...

Me faltas...
Me faltas, se cierne sobre mi un viento frio,
la soledad me abraza,
tengo miedo de que nada me alcanza,
pues sigo esperando por tus labios
que mitiguen mis ansias..
No hago mas que llorar,
intuyo en que un vacio jamas se llenara,
si algun dia me faltas
nada podra consolar a este pobre mortal...
Te amo, por Dios que te amo,
te extraño horrores,
como una eterna ausencia que se hace efimera
cuando posas tus manos sobre mis mejillas...
Si supieras como me siento,
si me vieras en este momento,
sabrias que solo lloro por no tener tu cuerpo,
te necesito mas de lo que piensas...
Lloro, porque me duele no tenerte junto a mi,
porque no puedo dejarte de extrañar,
pues siempre... a donde vaya...
me seguiras y me faltaras... me haces mucha falta.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.

sábado, 26 de junio de 2010

Teoria de los dos demonios...

Teoria de los dos demonios...
Todo lo que escriba a continuacion es solo una teoria,
porque del dicho al hecho hay un largo trecho,
aunque creo que no hay mayor ficcion
que la misma realidad...
En una sociedad donde se enfrentan grupos, personas,
que estan de lados diferentes,
unos que apuestan por la ley y el orden
respetando la propiedad individual,
y otro que recurren a la anarquia
como algo mas que natural para corromper el orden.
Estos grupos antagonicos intentan destruirse,
a menudo involucrando a terceros,
como en el caso de Mexico o Colombia,
lugares por excelencia para la naturalizacion de la violencia,
para una militarilizacion de la sociedad.
Pero el hecho trasciende las fronteras,
rompe con esa logica interna de estos paises,
regionalizandose y colocandose en otros estados.
Contemplando como la sociedad es agazapada
y controlada por el miedo que ejercen estos grupos,
nadie puede hacer su vida normal,
pues lo unico que priva es volver vivo a casa.
Como he escrito anteriormente,
se necesita siempre de un enemigo,
se necesita insoslayablemente de ese obstaculo,
de ese obice e invensible enemigo,
para que el estado ejercite su don de control.
Ejerciendo una violencia simbolica, el estado se centra
en lograr la paz y el orden en una sociedad,
consensuando para que esta hecho,
pues el estado es simplemente la creacion del hombre
para cuidar a los hombres de los hombres.
Entonces podemos entender que el estado necesita
si o si, de lo contrario, del caos y la anarquia,
para justificar su rol de protector,
y garantizar los derechos establecidos.
Creo que tanto los policias, como los ladrones,
son iguales, no en un sentido peyorativo,
no tratando de justificar a cada grupo,
pero si teniendo en cuenta que hay arreglos entre ellos.
No todos los policias son malos, no todos los ladrones
matan en cada robo,
pero si, puede que haya un trato entre ellos,
porque se necesitan mutuamente.
La corrupcion no es novedad, esta desde el inicio del poder,
desde que el hombre intento adueñarse de otros hombres,
es como en el inicio del mundo,
donde desde el principio hubo y habra...
Un Dios, y muchos demonios.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.

jueves, 24 de junio de 2010

¡GRACIAS!

¡GRACIAS!
Hace unos dias sufrimos un hecho delictivo
en el negocio familiar,
violentaron la puerta principal,
robando mercaderias, maquinarias y demas.
Nadie esta excento a estos hechos,
nadie tiene asegurado nada,
pues lo unico seguro, es que nada es seguro.
Tratamos de asimilar el mal rato,
consumimos la decepcion y la frustacion
de la mejor manera, asi tratamos de hacerlo.
Quizas lo mas increible haya sido la hora del robo,
en pleno dia, en una calle centrica,
dejando de lado todo dejo de verguenza,
se burlaron de todos.
Asi nos sentimos, burlados, siendo el centro
no solo de un ataque fisico material,
sino de un ataque moral,
destruyendo la confianza en nuestros protectores.
Estoy consciente de que lo robado desaparecio,
no volvera, lo unico que nos queda es mirar hacia adelante,
creyendo en un futuro mejor, como todos.
Agradecemos a todos nuestros clientes y amigos,
a todos los conocidos que al conocer la noticia,
se acercaron al local para darnos su apoyo
y su condena hacia el hecho.
Creo que escribo en nombre de todos,
al decir que no hay palabras que puedan
agradecerles el apoyo y la fuerza
que nos dieron.
No hay nada mas gratificante en la vida
que el saber que aun existen personas solidarias,
que se movilizan y transmiten muestras de afecto,
de alguna u otra manera, es lo mas bello de la vida.
Lo material se puede reemplazar,
las mercaderias se pueden volver a comprar,
pero lo humano es algo impagable,
es algo que no se puede comprar, ni remediar.
¡GRACIAS A TODOS POR ESTAR!.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.

lunes, 21 de junio de 2010

Mi alma vacia...

Mi alma vacia...
Sigo escribiendo al amor ausente,
a esa persona a la cual espero,
la cual me imagino e idealizo,
sigo esperando el dia en que aparezcas.
Sigo desangrandome cada noche,
llorando sin consuelo, elevando un ruego,
pidiendole a Dios por tu aparicion,
porque enciendas de nuevo mi amor.
Susurro en el viento algun poema,
esperando por ti, sigo aqui, esperando que vengas,
consumo las esperanzas en una hoguera
en donde, poco a poco, se queman mis ideas...
Cada dia que pasa solo sobrevivo
por volver a sentir,
lo que alguna vez tuve y perdi...
No es facil para mi seguir,
no es bueno para mi alma sufrir asi,
sin embargo deseo llegar
al dia en que aparezcas y seas mi realidad...
Quede con mi alma vacia,
anhelo llenarla de nuevo,
espero por tus caricias por dentro,
solo deseo volver a enamorarme... de ti.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.

jueves, 17 de junio de 2010

Hambre de Gloria...

Hambre de Gloria...
En estas fechas, y cada cuatro años se juega el mundial de futbol,
el deporte que es adoptado por la mayoria de los paises,
el deporte que une y desune a regiones dentro de un mismo pais.
En estas ultimas fechas, en estos ultimos y primeros partidos que vi,
con los resultados a favor de un pais, de una seleccion,
pude apreciar la falta de diversion que hay en ellos,
y el logro de ganar un partido, se festeja como si se hubiese
ganado el mundial.
La hiperbole con la que se festeja, nada tiene que ver
con la realidad, dado que solo es un simple partido,
pero como paso en ulteriores casos,
es un partido en donde un pais se ve reflejado.
Es simple y sencillo dramatizar sobre el final
de un partido mundialista,
pero es al mismo tiempo loable
pensar que una alegria hace falta siempre.
Los seleccionados dejan todo en la cancha,
dejaran todo por quedar tallados en la historia,
en la memoria de todos los que pueden ver
y disfrutar de la copa.
No es la excepcion a ningun pais, todos quieren llegar,
solo que uno se quedara con el trofeo,
no importa ser segundo, lo importante
es ganar.
Argentina, un pais futbolero como ninguno,
ha encontrado en el futbol esa identidad
que ningun gobierno pudo realzar,
porque seguimos divididos,
seguimos siendo ese crisol de razas en un pais aluvional.
Pero, con una misma pasion, una misma ilusion,
una misma manera de entender al mundo del deporte,
como ningun otro pais del mundo,
somos argentinos, somos pasion en si mismos.
Cada vez que se gane un partido, cada partido es un festejo,
cada festejo es una muestra mas
de la necesidad de unirnos y celebrar,
porque la sociedad argentina esta dividida
de manera muy marcada, con estamentos solidos.
Como cuando Mandela unio a Sudafrica con el Rugby,
como las copas mundiales nos unieron en un festejo
interminable, asi tambien queremos que nos vuelvan a unir,
porque tenemos hambre de gloria,
queremos ser protagonistas y poner de nuevo
el nombre de Argentina en la historia.
Fernando Alberto Rodríguez Fernández.